Todas nosotras esperamos con ansias el momento en que recibiremos el anillo de compromiso y la propuesta de matrimonio.
Pero detrás de esta espera hay una antigua tradición…

Los primeros testimonios del anillo de compromiso se remontan a la antigua Roma: se piensa que este era regalado por el chico a la futura esposa durante el sponsalia, el equivalente a nuestra fiesta de compromiso.

El primer anillo de compromiso con diamante apareció en la Edad Media: fue de hecho encargado en 1477 por el archiduque de Austria Maximiliano I como regalo para María de Borgoña.
También en la antigua Roma se encuentra el significado de que el anillo de compromiso símbolo del compromiso entre dos enamorados debe llevarse en el dedo anular izquierdo porque precisamente este dedo pasa la vena amoris, una vena conectada directamente con el corazón.

¿Y ustedes, ya han recibido el anillo de compromiso?
No se preocupen, mientras esperan que llegue el príncipe azul pueden regalarse un anillo de las Nuestras Nuevas Colecciones.